Fidel Castro visitó Cabaiguán en dos ocasiones. Esta es una afirmación que pocos conocen, a pesar de que aún quedan testimoniantes de aquel encuentro que pueden narrar los momentos vividos.
Por: Daisy Pilar Martín Ciriano
Para muchos resulta desconocido el momento en que a finales de 1960 y en la dura etapa de lucha contra el bandidismo, y a solicitud de Félix Torres, acudió al territorio un destacamento de las tropas que se encontraban en el Escambray al frente del cual estaba el mismísimo Fidel Castro. Acompañado de Osvaldo Dorticós, Augusto Martínez Sánchez y una escolta personal dirigida por el cabaiguanense Octavio Garcés y otros soldados de la compañía, llegaron al cuartel de Cabaiguán alrededor de las 10 de la noche.
Cerca de la madrugada marcharon hacia la zona de Manaquita para capturar a un grupo de alzados que se encontraba merodeando la comarca, dentro de la cual, tenía sus colaboradores. Y el cerco por la parte cercana a Sancti Spíritus estaba desplegado. Fidel, junto al reducido grupo de soldados y algunos milicianos del cuartelito de Cuatro Esquinas se desplegaron y realizaron acciones combativas, aunque no hubo enfrentamiento. Luego se conoció que el día anterior los alzados se habían trasladados del lugar.
Una vez de regreso hacia Cabaiguán, Fidel indicó a Regueiros, que se desempeñaba como presidente del INRA en la región, que toda el área que perteneciera a los colaboradores fuera intervenida y destinada para la creación de la granja del pueblo. Esta fue la primera en el territorio, que surgió bajo el nombre de Noel Sancho Valladares, para enaltecer la figura del mártir local caído durante la liberación del poblado el 22 de diciembre de 1958. Hoy aún recuerdan aquellos instantes los cabaiguanenses Diosdado González y Mario Alba Castellón, participantes como prácticos en la acción.
Otro momento importante recoge la historia con la presencia de Fidel en Cabaiguán, cuando en 1972 asistió a la inauguración de la Comunidad de Tres Palmas donde departió con los pobladores del lugar y les ofreció orientaciones acerca del trabajo a desarrollar en colectivo. De este encuentro subsisten también algunas anécdotas jocosas ocurridas entre Fidel y un naciente cuadro de la comunidad.
Y queda también en el recuerdo, más cercano a nuestros días su cruce y parada en la construcción del puente de la autopista nacional que está cercano a Punta Diamante, en 1989. Allí sostuvo encuentro con Juan Moya Campos, entonces Secretario del PCC y con el ingeniero de la obra, Luego continuó viaje por la carretera hasta Tres Palmas y Sancti Spíritus. Estos son los momentos en los cuales el Comandante estuvo en Cabaiguán.
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